La Mamoplastia es uno de los procedimientos más demandados y más seguros hoy en día, ya que se realizan en un tiempo no mayor a tres horas y permiten volver a la vida normal tras tres días de reposo.
Las Cirugías Plásticas son una opción que muchas mujeres tienen en cuenta cuando quieren poner fin a algún complejo. Uno de ellos suele ser el pecho, ya sea por su forma o por su tamaño, y por ello la Mamoplastia es una de las intervenciones más solicitadas.
Las técnicas han evolucionado y por ello las operaciones son cada vez menos agresivas.
CONSEJOS:
Acudir a una buena clínica.- Muchas mujeres observan antes el costo que la eficiencia del centro, llegando a acudir a clínicas que no están certificadas. Ante una operación de este tipo, el precio de la intervención debe quedar en un segundo plano y prestar atención a la calidad y garantía del servicio.
Elegir un cirujano experimentado.- Es indispensable ponerse en manos de una persona altamente calificada. No todos los Cirujanos Plásticos dominan la Mamoplastia, así que se debe recurrir a un especialista. Este experto no solo debe saber realizar la operación, sino asesorar a la paciente del mejor resultado para ella y del tratamiento óptimo según su constitución y fisonomía. El cirujano debe contar con cédula de especialidad y estar certificado.
Conocer las prótesis existentes.- Hoy en día hay varios tipos de prótesis y es importante encontrar la que mejor se adapte a nuestras necesidades. Los modelos de gel de silicón cohesivo son los mejores. Su tacto es natural, logran la temperatura corporal y no se mueven de su zona de colocación. Además, permiten la reproducción y lactancia materna y la realización de estudios médicos mamarios, como Mastografía o Biopsia.
Material con garantía de seguridad.- Antes de la cirugía, el Cirujano Plástico debe recomendar las prótesis de mayor calidad. Después del procedimiento se debe exigir una tarjeta de identificación de los implantes con el número de registro de la prótesis. Esto garantizará su autenticidad.
Tener buena salud.- Todo paso por el quirófano exige que la persona se encuentre en buen estado físico y emocional, para evitar que cualquier tipo de leve complicación pudiera agravarse.
Estar segura de una misma.- Antes de entrar al quirófano, la mujer debe ser consciente de que el paso que va a dar es porque quiere y porque supondrá una mejora en su vida.
Consulta de valoración previa.- Realizarse una Cirugía de aumento de busto no es asesorarse vía telefónica y fijar un día para la operación, requiere al menos de la consulta de valoración para revisión. No todas las pacientes son candidatas a este procedimiento y un Cirujano responsable sólo opera a quienes se encuentran en un estado de salud óptimo. Esto garantizará el mejor resultado posible.
Fijar una buena fecha.- La intervención es sencilla y no dura más de dos o tres horas, pero para evitar nervios es conveniente encontrar un buen espacio en la agenda. Además, es importante recordar que se necesitan dos o tres días de reposo intenso antes de volver a la normalidad.
Seguir un buen post-operatorio.- Aunque la paciente reciba el alta, debe seguir una serie de consejos para evolucionar correctamente. Estos parten desde las visitas rutinarias hasta la cura de las cicatrices en casa.