La Blefaroplastia es un procedimiento para rejuvenecer los párpados mediante la extracción del exceso de grasa y piel de los párpados. Permite corregir la caída de los párpados superiores y las bolsas de los superiores e inferiores, haciendo que la mirada luzca más rejuvenecida y menos cansada.
Este procedimiento es el tercero más demandado por las mujeres y el segundo por los hombres. Los pacientes que recurren a ella suelen tener más de 35 años, aunque, en casos con tendencia familiar a bolsas en los párpados inferiores, son más jóvenes.
Antes de someterse a una cirugía de párpados, es indispensable valorar el estado de salud general del paciente para descartar problemas como:
- Tiroides
- Lágrima insuficiente
- Presión arterial alta
- Enfermedades cardiovasculares
- Diabetes
La intervención suele realizarse bajo anestesia local más sedación o, de manera menos frecuente, bajo anestesia general, con una duración de entre una y tres horas. La mayoría de las veces, las incisiones se realizan en las líneas naturales de los párpados superiores y justo debajo de las pestañas en los inferiores. A través de estas incisiones, se separa la piel de la grasa y el músculo, extirpando el exceso de la primera y, en ocasiones, el de piel y músculo.
En pacientes jóvenes en los que sólo hay exceso de grasa, se puede realizar una Blefaroplastia transconjuntival de los párpados inferiores, haciendo la incisión en el interior del párpado inferior, sin dejar cicatriz visible.
POSTOPERATORIO: CONSEJOS Y PRECAUCIONES
Tras la cirugía, el paciente deberá aplicarse unas gotas en los ojos para lubricarlos y tomar la medicación indicada. Además, deberá mantener la cabeza elevada durante unos días y aplicarse compresas frías para disminuir la inflamación y los hematomas.
Los puntos se retirarán a los 5-7 días mientras que el edema y los hematomas disminuirán gradualmente hasta desaparecer por completo.
Durante las primeras semanas tras la intervención, el paciente puede notar lagrimeo excesivo, hipersensibilidad a la luz y cambios temporales en la agudeza visual.
Respecto a la vuelta al trabajo, puede darse transcurridos unos siete días después de la cirugía. Asimismo, se aconseja mantener un reposo relativo durante tres o cinco días, evitar actividades fuertes en las tres primeras semanas y usar lentes de sol.